¿Qué es el Derecho a la Salud?

¿Qué es el Derecho a la Salud?

Para que toda dinámica social se desarrolle adecuadamente, es necesario garantizarle a la ciudadanía derechos elementales para su vida, tal es el caso del derecho a la salud, que es un principio universal, al que todas las naciones deben apegarse.

En este artículo veremos cuál es la definición del concepto «derecho a la salud» y la importancia de la prevención como un estilo de vida principalmente importado de las costumbres orientales.

Qué es el derecho a la salud

El términos generales, el derecho a la salud es precisamente la garantía que debe gozar toda persona de contar con un buen estado físico y mental, para ello, además de calidad de vida, debe tener a su disposición buena infraestructura, planes y programas para atender su salud preventiva y curativa.

Esto que parece obvio, en algunos países es imposible disfrutar de un amparo por parte de las administraciones que garanticen el acceso al sistema de salud e incluso a algunos aspectos básicos de sanidad.

El principal problema en la mayoría de los países es el acceso al agua potable, alimentos básicos como los derivados del trigo, e incluso un sistema de atención primaria que satisfaga necesidades comunes como dolencias, enfermedades comunes, recomendaciones de medicamentos, o diagnósticos.

Lo mismo ocurre con la educación sanitaria. Los proyectos de intervención comunitaria están orientados a la información, y la prevención.

Estos puntos son de vital importancia para tener un mínimo garantizado de estilo de vida de calidad, parte fundamental de la felicidad y el desarrollo humano.

La prevención como un estilo de vida

En primer lugar, el derecho a la salud debe salvaguardar la vida y el buen estado físico y mental de cada persona echando mano de elementos de tipo preventivo. Es decir, los sistemas de salud en cada país deberían apuntar principalmente a la prevención.

A pesar de esto, el aspecto curativo debe ser uno de los más óptimos, ya que es precisamente en este nivel cuando más grado de profesionalismo y calidad en el servicio requiere cualquier paciente. El derecho a la salud es sin duda un eslabón que no puede faltar para que la ciudadanía logre una vida digna.

Pero hay problema, no basta con acudir al médico cuando tengamos un problema. La prevención se entiende como un repertorio de comportamientos de los individuos que minimizan precisamente el acudir a hospitales o consultas.

Y los pilares para ello son básicos: alimentación variada, deporte suave y diario, y para mejorar nuestra salud mental, algo que nos haga felices, sentir bien, o encontrar esa conexión sencilla con la vida. 

El derecho a la salud según la Constitución Española

Los países distan en cuanto a sus legislaciones, pero en el caso de los derechos humanos, se mantiene una línea universal, por decirlo de algún modo. Precisamente el derecho a la salud es considerado uno de los derechos humanos fundamentales.

De acuerdo a la Constitución Española, específicamente en el artículo 43, se dispone y se reconoce el derecho a la protección de la salud, es decir, a garantizar las condiciones idóneas para que cada ciudadano esté adecuadamente tratado para gozar de un buen estado de salud.

Asimismo, el artículo destaca que es competencia directa de los poderes públicos de la Nación “organizar y tutelar” la salud, esto por medio de la prevención, así como la disposición de los servicios requeridos para tal fin.

En ese mismo artículo se dispone que es responsabilidad de los poderes públicos fomentar tanto la educación sanitaria, como física y el deporte, esto como una manera de lograr manejar asertivamente el ocio y a la vez cuidar de la salud.

En la legislación española, la protección a la salud gozan de ciertas medidas constitucionales: la defensa del pueblo, así como la prohibición de decretos o leyes que atenten contra la protección del derecho a la salud.

¿Qué derecho a la salud tienen los niños y las mujeres?

En el trascurso de la historia se ha visto muy marcada la vulnerabilidad en caso de niños y mujeres en cuanto a los derechos humanos fundamentales, como por ejemplo la salud.

Es por ello que en la mayoría de las naciones se ha logrado convenir una protección integral y especial para ellos, esto en función de ir minimizando ciertas deficiencias que se presentaban debido a esa llamada vulnerabilidad.

Es importante considerar la importancia de las mujeres y niños al desarrollo social, no dejando de lado a la figura masculina, pero que paradigmáticamente han sido considerados estos primeros como personas con un elevado grado de vulnerabilidad social, sobre todo en sociedades machistas en las que los niños y las mujeres no reciben precisamente los tratos preferenciales.

En ese sentido, hay que destacar la lucha internacional que organizaciones de derechos humanos han emprendido en función de estandarizar y lograr obtener un elevado grado de protección y atención primaria a la salud de las féminas y los niños.

En ambos casos (mujeres y niños) el refuerzo de la salud preventiva es una de las principales características que destaca en cuanto a la protección del derecho a la salud en diversos países.

Específicamente en el caso de las mujeres el derecho a la salud comprende o debe comprender una sana y adecuada salud y educación sexual y reproductiva, además de atención integral y de calidad para féminas en estado de gestación.

Igualmente, se debe y en la mayoría de los casos se dispone prevención y atención a enfermedades virales y de transmisión sexual.

Lo mismo con enfermedades degenerativas que se presentan con mayor frecuencia en mujeres que en hombres.

Con respecto a los niños, la salud preventiva es primordial, sobre todo en la etapa inicial en la que debe garantizarse todas las vacunas y sistemas médicos de refuerzo para evitar el contagio o padecimiento de ciertas enfermedades, a fin de evitar principalmente la morbilidad y mortalidad infantil.

En el caso específico de los niños, son ellos quienes resultan priorizados para jornadas de vacunación y control médico.

Además de ello, el derecho a la salud en niños está estrechamente vinculado al derecho a la vida y a la alimentación; así como a una adecuada manutención que es responsabilidad directa de sus padres o tutores legales.

Es importante aclarar que cada legislación conlleva ciertas diferencias, en ciertos casos las mujeres y niños gozan de leyes especiales para la protección de sus derechos, pero en líneas generales la constitución de cada país establece la igualdad de los ciudadanos en la atención y resguardo de derechos como el de la salud.

La importancia del derecho a la salud y el bienestar para nuestra calidad de vida

Para gozar de una vida plena y de calidad es primordial que los seres humanos cuenten con excelentes condiciones de salud. La vida es considerado, por sobre todas las cosas, el bien más preciado de la humanidad y por ello en su totalidad la legislación en materia de derechos humanos está centrada primordialmente en salvaguardarla.

Teniendo claro esto, es muy evidente que el derecho a la salud es sin duda la principal condición que deben cumplir las diversas sociedades para lograr otorgarle a su ciudadanía calidad de vida.

Es por ello que los programas tanto preventivos, como sanitarios son una responsabilidad ineludible para cualquier sistema de gobierno. Es además necesario recordar que existen, pese a los adelantos tecnológicos y culturales, sociedades que no cuentan con estos servicios básicos para la protección y atención de su salud tanto física como mental.

En este caso, son precisamente estas sociedades las que han alentado la lucha internacional para lograr establecer un sistema estandarizado para la atención médica.

El derecho a la vida es amplio y por ende abarca innumerables eslabones, pero esencialmente tener una vida significa gozar plenamente de ella y para eso es necesario que las condiciones generales sean las de más elevado nivel.

Esto quiere decir que la salud debe ser tratada de manera preferencial pues es a través de ella que cualquier persona puede obtener lo que llamamos calidad de vida.

No se disfruta de calidad de vida cuando se padece una enfermedad incurable que no pueda ser tratada adecuadamente y que ofrezca a quien la padece dignidad o tranquilidad. No se puede gozar de calidad de vida si no se cuenta con los medios y la infraestructura adecuada para prevenir desde edades tempranas el padecimiento de enfermedades de cualquier tipo.

Por ello y por norma general, el derecho a la salud es una de las principales obligaciones sociales, en donde convergen tanto los derechos como los deberes ciudadanos.